9 de julio de 2012

LAS MUJERES DE MI GENERACIÓN SON LAS MEJORES de Santiago Gamboa


La modelo es Lizzie Miller y fue fotografiada para la revista Glamour, mostrando su belleza naturalmente.  
Las mujeres de mi generación son las mejores. Y punto. Hoy tienen cuarenta y pico, incluso cincuenta, y son bellas, muy bellas, pero también serenas, comprensivas, sensatas, y sobre todo, endiabladamente seductoras, esto a pesar de sus incipientes patas de gallo o de esa afectuosa celulitis que capitanea sus muslos, pero que las hace tan humanas, tan reales. Hermosamente reales.
Casi todas, hoy, están casadas o divorciadas, o divorciadas y vueltas a casar, con la idea de no equivocarse en el segundo intento, que a veces es un modo de acercarse al tercero, y al cuarto intento. Qué importa... Otras, aunque pocas, mantienen una pertinaz soltería y la protegen como una ciudad sitiada que, de cualquier modo, cada tanto abre sus puertas a algún visitante.
¡Qué bellas son, por Dios, las mujeres de mi generación! Nacidas bajo la era de Acuario, con el influjo de la música de Los Beatles, de Bob Dylan... Herederas de la "revolución sexual" de la década del 60 y de las corrientes feministas que, sin embargo recibieron pasadas por varios filtros, ellas supieron combinar libertad con coquetería, emancipación con pasión, reivindicación con seducción. Jamás vieron en el hombre a un enemigo a pesar de que le cantaron unas cuantas verdades, pues comprendieron que emanciparse era algo más que poner al hombre a trapear el baño o a cambiar el rollo de papel higiénico cuando este, trágicamente, se acaba, y decidieron pactar para vivir en pareja, esa forma de convivencia que tanto se critica pero que, con el tiempo resulta ser la única posible, o la mejor, al menos en este mundo y en esta vida.
Son maravillosas y tienen estilo, aún cuando nos hacen sufrir, cuando nos engañan o nos dejan. Usaron faldas hindúes a los 18 años, se cubrieron con suéteres de lana y perdieron su parecido con María, la Virgen, en una noche loca de viernes o de sábado después de bailar. Se vistieron de luto por la muerte de Julio Cortázar, hablaron con pasión de política y quisieron cambiar el mundo, bebieron ron cubano y aprendieron de memoria las canciones de Juan y de Pablo. Adoraban la libertad, algo que hoy les inculcan a sus hijos, lo que nos hace prever tiempos mejores, y, sobre todo, juraron amarnos para toda la vida, algo que sin duda hicieron y que hoy siguen haciendo en su hermosa y seductora madurez. Supieron ser, a pesar de su belleza, reinas bien educadas, poco caprichosas o egoístas, diosas con sangre humana. El tipo de mujer que, cuando le abren la puerta del carro para que suba, se inclina sobre el asiento y, a su vez, abre la de su pareja desde adentro.
La que recibe a un amigo que sufre a las cuatro de la mañana, aunque sea su ex novio, porque son maravillosas y tienen estilo, aún cuando nos hacen sufrir, cuando nos engañan o nos dejan, pues su sangre no es tan helada como para no escucharnos en esa necesaria y salvadora última noche en la que están dispuestas a servirnos el octavo whisky y a poner, por sexta vez, esa melodía de Santana. Por eso, para los que nacimos entre las décadas del 40, 50 y 60, el día de la mujer es, en realidad, todos los días del año, cada uno de los días con sus noches y sus amaneceres, que son más bellos, como dice el bolero, "cuando estás tú"... ¡Qué bellas son, por Dios, las mujeres de mi generación! Y si es más de 45... a medida que avanzo en edad, valoro las mujeres que tienen más de cuarenta y cinco, más que a cualquiera.
Aquí hay algunas razones de por qué. Una mujer de más de 45 nunca te va a despertar en la mitad de la noche para preguntarte "¿Qué estás pensando?".
No le interesa lo que estás pensando. Si una mujer de más de 45 no quiere mirar un partido de football ella no da vueltas alrededor tuyo. Se pone a hacer algo que ella quiere hacer y generalmente es algo mucho más interesante. Una mujer de más de 45 se conoce lo suficiente como para estar segura de sí misma, de lo que quiere, y de con quién lo quiere, son muy pocas las mujeres de más de 45 a las que les importa lo que tú pienses de lo que ella hace. Una mujer de más de 45 ya tiene cubierta su cuota de "relaciones importantes" y "compromisos". Lo último que quiere en su vida es otro amante posesivo. Las mujeres de más de 45 están dignificadas. Es muy raro que entren en una competencia de gritos en el medio de la ópera o en el medio de un restaurante caro. Por supuesto que si piensan que te lo mereces no van a dudar en dispararte un tiro. Las mujeres de más de 45 son generalmente generosas en alabanzas. Ellas saben lo que es no ser apreciadas lo suficiente. Las mujeres de más de 45 tienen suficiente seguridad en sí mismas como para presentarte a sus amigas. Una mujer más joven puede llegar a ignorar hasta a su mejor amiga. Las mujeres se vuelven psíquicas a medida que pasa el tiempo. No necesitas confesar tus pecados, ellas siempre lo saben. Son honestas y directas. Te dicen directamente que eres un imbécil si es lo que sienten sobre ti. Tenemos muchas cosas buenas que decir de las mujeres de más de 45 y por múltiples razones. Lamentablemente no es recíproco. Por cada impactante mujer de más de 45, inteligente, bien vestida, sexy, hay un hombre de más de 50... pelado, gordo, barrigón y con pantalones arrugados haciéndose el gracioso con una chica de 20 años.
Señoras, les pido perdón por ello...

El autor de esta nota, Santiago Gamboa, es colombiano y comentó lo siguiente sobre su publicación, diez años después:  
“La verdad es que no recuerdo si lo publiqué en el 2002 o el 2003 (no hay archivo digital de esos años en Cambio), pero lo seguro es que de inmediato empezó a circular como documento adjunto, de correo en correo, entre mujeres, y como solía tener una dirección para atender a los lectores comencé a recibir los más curiosos comentarios, situaciones conmovedoras o divertidas, confesiones desgarradas e incluso comprometedoras. Hasta donde le he podido seguir la pista ha sido traducido a una docena de idiomas y creo poder afirmar que es mi trabajo más famoso y difundido. Si alguno de mis libros hubiera circulado así yo sería un escritor de fama mundial. La propietaria de un hotel en Hawái me declaró “invitado permanente”; una funcionaria de la Embajada de Canadá en Caracas hizo de mí su confidente, me envió poemas, canciones y fotos de su matrimonio; radios de toda América Latina, Estados Unidos y España, en sus programas femeninos, pidieron autorización para leerlo en onda; en un viaje a Moscú para presentar un libro, una periodista se refirió al texto y me preguntó si al escribirlo había pensado en alguna mujer rusa en particular, ya que, según ella, había ciertas claves de la feminidad eslava (le respondí: “pienso todo el tiempo en mujeres rusas”); fue incluido en la página web del sindicato español Confederación General de Trabajadores (CGT); fue plagiado en República Dominicana, con algunos cambios; puesto al día y aumentado en Costa Rica y Venezuela; recibí por él una acusación de plagio en Cali (resuelta a favor, pues el artículo que supuestamente plagié se publicó tres años después del mío, lo que invirtió las culpas); la embajadora de Grecia ante la Unesco, en París, me pidió durante una cena que se lo dedicara —lo traía en griego—, y, en general, para miles de mujeres soy exclusivamente el autor de ese texto.
Pero hay algo aún más curioso y es que al pasar de un correo a otro ha sufrido modificaciones, agregados, y por eso hay versiones largas con párrafos nuevos que son apócrifos, anónimos. ¿Quién los puso ahí? Misterio. Ahora, por ejemplo, se amplió a las mujeres de cincuenta, cuando el original se refería exclusivamente a las de cuarenta. Pero no tengo nada en contra pues en el 2012 las de mi generación son las de cincuenta, o sea que son las mismas mujeres. Desde este punto de vista es el único texto que se transforma con la edad real de sus personajes. En cuanto a los agregados, debo confesar que algunos son demasiado new age y me hacen temblar las pestañas, pero la verdad es que hace ya tiempo comprendí que ese texto, escrito para las mujeres de mi generación, les pertenece a ellas, así que pueden seguirlo leyendo y modificando a su gusto, y por supuesto que lo seguiremos ajustando en cada década que pase”.

Fuente:
De Santiago Gamboa "Las Mujeres de mi generación son las mejores" http://maxmartini.lacoctelera.net/post/2005/11/21/de-santiago-gamboa-las-mujeres-mi-generacion-son-las
"Mujeres", diez años después por Santiago Gamboa, 24 Feb 2012 http://www.elespectador.com/impreso/opinion/columna-328655-mujeres-diez-anos-despues
Lizzie Miller: http://www.frontera.info/EdicionEnLinea/Notas/VidayEstilo/27082009/398567.aspx



23 de junio de 2012

Carta de un perro abandonado


"El peor pecado para con nuestras criaturas amigas, no es el odiarlas, sino ser indiferentes con ellas, esa es la esencia de la inhumanidad". George Bernard Shaw
Una semana: Hoy hace una semana que he nacido. Que alegría haber llegado a este mundo.

Un mes: Mi mamá me cuida muy bien. Es una mamá ejemplar.

Dos meses: Hoy me separaron de mi mamá. Ella estaba muy inquieta y con sus ojos me dijo adiós. Espero que mi nueva familia humana me cuide tan bien como ella me ha dicho que harán.

Cuatro meses: He crecido rápido, y todo me llama la atención. Hay varios niños en la casa que para mí son como hermanitos. Somos todos muy inquietos, ellos me tiran del rabito y yo les mordisqueo jugando. Nos divertimos mucho.

Cinco meses: Hoy me regañaron. Mi ama se molestó porque me hice pipí dentro de casa, pero nunca me habían dicho donde hacerlo... Además duermo en un cuartito... y ¡ya no aguantaba más!

Ocho meses: Soy un perro feliz. Tengo el calor de un hogar, y me siento tan seguro, tan protegido... Mi familia humana me quiere y me deja hacer muchas cosas. Cuando están comiendo yo les pido algo y siempre me lo dan. Y el jardín de casa es estupendo, y puedo escarbar como mis antepasados los lobos, escondiendo la comida. Creo que nunca hago nada mal porque nunca me dicen nada...

Doce meses: Hoy cumplo un año. ¡Soy un perro adulto! Mis amos dicen que crecí más de lo que ellos pensaban. Seguro que se sienten orgullosos de mí…

Trece meses: Que mal me sentí hoy. Mi hermanito, uno de los niños, me quitó la pelotita. ¡Yo nunca le quito sus juguetes! Así que se la quité, pero mis mandíbulas se han hecho fuertes y le hice daño sin querer. El gritó y lloró y yo me sentí muy triste. Después del susto me encadenaron casi sin poder moverme. Hacía mucho sol y tenía mucho calor y no había agua cerca... Y les oí decir que iban a tenerme en observación o algo así, y que soy un desagradecido. No entiendo nada…

Quince meses: Ya nada es igual. Vivo en la azotea y me siento muy solo. No sé porqué mi familia ya no me quiere. A veces se les olvida que tengo hambre y sed, y cuando llueve no tengo ningún techo para cobijarme.

Dieciséis meses: Hoy me bajaron de la azotea. Me puse muy contento de que me perdonaran, y daba saltos de gusto y movía el rabo como nunca. ¡Y además me van a llevar de paseo! Monto en el coche y espero a ver a dónde me llevan, tengo muchas ganas de correr y jugar con mi familia. Paramos, abrieron la puerta y yo me bajé feliz. Estábamos en la carretera, al lado de un campo y pensé que pasaríamos un día estupendo. No entiendo por qué cerraron la puerta y se fueron. ¡Espérenme!, les grité, ¡Se olvidan de mí! Corrí detrás del coche con todas mis fuerzas, y muy angustiado, iba viendo que no podía alcanzarlos, que no podía correr más y que el coche se iba haciendo pequeñito. Me habían olvidado. Me habían abandonado…

Diecisiete meses: He intentado encontrar el camino para volver a casa y no lo he conseguido. Estoy perdido. A veces me encuentro con gente buena que me mira triste y me da algo de comer. Yo les doy las gracias con la mirada, y les digo que querría que me adoptaran, que les prometo ser leal como nadie... pero sólo dicen "pobre perrito, se debe haber perdido". Y se van y me dejan solo otra vez...

Dieciocho meses: El otro día pasé por un colegio y vi a muchos niños como mis antiguos hermanitos. Me acerqué y un grupo de ellos, riéndose, me lanzó una lluvia de piedras, "a ver quién tiene más puntería", decían. Una de las piedras me dio en un ojo y ya no veo con él.

Diecinueve meses: Ahora ya no se me acerca casi nadie, creo que es porque ya no soy un perro bonito. Estoy muy flaco, perdí mi ojo, tengo alguna herida de algún perro más fuerte que me mordió cuando intentaba comer y hace mucho que nadie me cepilla el pelo. La gente no me acaricia. Últimamente lo que abundan son los escobazos que me dan cuando intento dormir un poco a la sombra de alguno de sus porches.

Veinte meses: Casi no puedo moverme. Hoy intenté cruzar la calle por donde pasan coches y uno me atropelló. Aunque yo creo que estaba en un lugar seguro... y no olvidaré la cara de satisfacción del conductor que hasta se ladeó con tal de darme... Si me hubiera matado... pero qué va... sólo me dislocó la cadera y el dolor es horrible. Mis patas traseras no se movían, así que con mucha dificultad me arrastré hacia el borde del camino, donde había un poco de hierba.

Llevo diez días bajo el sol, la lluvia y el frío, sin comer. Ya no puedo mover nada, el dolor es insoportable. Me siento muy mal, cuando llovió se hizo un charco donde yo estaba y como no podía moverme estuve mojado muchísimo tiempo, y creo que mi pelo se está cayendo. Alguna gente pasa sin verme, otros me dicen "no te acerques"... ¡Pero si ni me puedo mover!

Ya casi estoy inconsciente, pero una fuerza extraña me hizo abrir los ojos. Una mujer muy dulce me decía "pobre perrito, como te han dejado". Junto a ella venía un señor de bata blanca, que empezó a tocarme y dijo "lo siento señora, pero esto ya no tiene solución, es mejor que deje de sufrir". A la señora se le saltaron las lágrimas y asintió, y yo, como pude, moví el rabito agradeciéndole que me ayudara a descansar. Sentí un pinchazo y me dormí mientras ella me acariciaba la cabeza, pensando porqué tuve que nacer si nadie me quería…

QUE NINGÚN ANIMAL TENGA QUE SUFRIR ESTO. LOS ANIMALES NO SON JUGUETES, NI OBJETOS DESCARTABLES. 

Es vergonzoso para nuestra especie que siendo el perro el mejor amigo del hombre, sea el hombre el peor amigo del perro." Eduardo Lamazón

Fuente: El Campito Refugio http://www.elcampitorefugio.org/

19 de mayo de 2012

I-Legal Alien: Setting things straight: I am an American. Period.

I was born in Colombia, so I am an American. «No, you are not» would US citizens say. Yes, I am, whether you like it or not.
Let me explain: On October 12th 1492, an Italian guy named Cristoforo Colombo arrived at todays Dominican Republic and discovered - by coincidence - what we call today America. America is a continent, not a country. So everybody born on American soil is an American. It doesn't matter if it is North, Central or South America. There is only one America,  just as there is only one Europe, Africa or Asia. North, Central and South are mere orientation terms and not names for separate continents. As a matter of fact, the term «The Americas» only exists in the United States.

Now, I don't know when we Americans lost the right to call ourselves Americans. Just because people born in the US do not have an own gentilicio (name of the inhabitants of a country or region etc. - yes, English doesn't even have an own word for gentilicio), it doesn't mean they can claim the continent's gentilicio as their sole property. I don't think there is any other country in the world that doesn't have a gentilicio. People born in Germany are Germans, those born in China are Chinese, those born in Mexico are Mexicans and so on. But people born in the US don't call themselves ‘Unitedstaters‘, they call themselves Americans and will tell any person born in Mexico, Guatemala, Brazil, Colombia and even Canada they are not Americans. Yet in Spanish, we do have a gentilicio for them: estadounidenses. Go figure! 

Section I of the 14th Amendment to the US Constitution which regulates citizenship reads: 
Section 1. All persons born or naturalized in the United States, and subject to the jurisdiction thereof, are citizens of the United States and of the State wherein they reside. No State shall make or enforce any law which shall abridge the privileges or immunities of citizens of the United States; nor shall any State deprive any person of life, liberty, or property, without due process of law; nor deny to any person within its jurisdiction the equal protection of the laws.
Nowhere is the term 'American' to be found. Very different in the German Grundgesetz Art. 116, where the term Deutscher (German) is clearly stated.
1) Deutscher im Sinne dieses Grundgesetzes ist vorbehaltlich anderweitiger gesetzlicher Regelung, wer die deutsche Staatsangehörigkeit besitzt oder als Flüchtling oder Vertriebener deutscher Volkszugehörigkeit oder als dessen Ehegatte oder Abkömmling in dem Gebiete des Deutschen Reiches nach dem Stande vom 31. Dezember 1937 Aufnahme gefunden hat.
Same thing in the Colombian constitution - Title III, Chapter I:
ARTICULO  96.  Modificado  por  el  artículo  1  del  A.L.  1  de  2002.  Son nacionales colombianos: [...]
And not too different in the Mexican constitution:

CAPITULO II DE LOS MEXICANOS

Artículo 30 [...]

A).- SON MEXICANOS POR NACIMIENTO:
(REFORMADO MEDIANTE DECRETO PUBLICADO EN EL DIARIO OFICIAL DE LA FEDERACION EL 18 DE ENERO DE 1934)
Maybe it is because the US claims to be a world power, maybe because it became common to refer to the US as America. But still, we, all those people born on the American continent are Americans. Remember it is The United States OF America and not The America OF the United States. We Americans were kind enough to allow gentlicio-free US citizens to borrow the term 'Americans' from all of us other Americans. But this doesn't give them the right - by any means -to take sole and exclusive possession of it. 


So yes, I am an American. Period! 


United States / America - Learn the difference

Disclaimer: English is not my mother language, so if you find a mistake, you may keep it!

Source: I-Legal Alien: Setting things straight: I am an American. Period....

6 de mayo de 2012

AFICIONES REALES

Juan Carlos Alfonso Víctor María de Borbón y Borbón-Dos Sicilias (dejémoslo en Juan Carlos, nada más) empezó con la caza mayor en 1962, en el gigantesco latifundio de un amigo, en Portugal: la Heredad de Palma, finca de 200.000 hectáreas, donde se divertía asesinando perdices, zorros y jabalíes. 

Luego, siguió Safarilandia (Mozambique, África), una gigantesca reserva de caza del tamaño de Euskadi, propiedad del barón alemán Werner von Alvensleben, a la que acudía la crema de la sociedad europea. El multimillonario griego Stavros Niarchos, el luego presidente francés Valéry Giscard y el entonces príncipe Juan Carlos eran algunos de los invitados de honor. Una fotografía de esas jornadas muestra a Juan Carlos, rifle en mano y sonriente, con sus primeros trofeos: tres cabezas de búfalo cafre y los cuernos de un antílope sable, un gran kudú y otra especie de ungulado. A sus lados, dos nativos sostienen 2 colmillos de elefante.
El entonces príncipe Juan Carlos posando con tres cabezas de búfalo cafre, los cuernos de un antílope sable y un gran kudú.
En la llamada edad de oro de la caza en África, Juan Carlos perseguía leones, leopardos y elefantes en las colonias portuguesas. Entre 1965 y 1975, cazar en Mozambique era caro, como hoy, pero al príncipe eso le tenía sin cuidado. Total, lo pagaba el Estado. También cazaba allí el torero Luis Miguel Dominguín, padre del cantante Miguel Bosé, igualmente taurino. África era un edén para algunas de las caras más visibles del franquismo y la privilegiada derecha española.
De izquierda a derecha, Amadeu Peixe, Don Juan Carlos y Werner, con una joven elefante, cazada el primer día del safari. Ella fue luego bautizada "Miss Mozambique". Del libro "Baron in Africa".
Siguió Angola, pese a que allí se luchaba una guerra independentista. Por el desierto angoleño pululaban los antílopes, búfalos y felinos. El Borbón logró su ansiado trofeo: Un hermoso leopardo. El infortunado felino cayó al suelo, ensangrentado y dando volteretas. Murió prácticamente en el acto. El príncipe se acercó al animal, lo colocó sobre una roca y posó junto al cadáver aún caliente: 
Foto: Publico.es
Como Juan Carlos, iban también a cazar el Presidente del Banco Santander, Emilio Botín, y su mujer, Paloma O´Shea. Ese Edén de la caza terminó con la descolonización de África. En 1975, la Revolución de los Claveles acabó con la dictadura portuguesa y las colonias africanas se libraron de Portugal.

Las guerrillas izquierdistas del Frente de Liberación de Mozambique y el Movimiento Popular de Liberación de Angola no permitieron ni un cazador en sus países. Pero, con el hambre y las guerras civiles que siguieron a la descolonizaciòn, casi exterminaron la fauna de animales mayores, reduciéndola en un 95% en Mozambique. El caso de los bùfalos fue el màs desgarrador.

La desaparición -temporal- de los cotos africanos, no obstante, no acabó con la devoción del monarca por la caza: participó, en Octubre del 2004, en una cacería en Rumanía en la que murieron abaleados un lobo y nueve osos pardos, entre ellos una osa gestante, según el periódico Romania Libera. El Palacio de la Zarzuela (Sede de la monarquìa española) no negó la acusación, pese al revuelo armado en la prensa rumana y española. No conforme con eso, el mismo año, según el diario inglés The Guardian, el rey obtuvo permiso, previo pago de 7 mil euros, para matar a un bisonte europeo (en grave peligro de extinción) en el bosque polaco de Bialowieza.
Foto inédita del rey alardeando de su escopeta de polvo de diamante (100.000 euros) con el fabricante, Ivo Fabbri.
El 2006, el funcionario ruso Sergei Starostin, del área de protección natural de la región de Vólogda (Moscú), lo acusó de matar a un pacífico oso domesticado, llamado Mitrofán, al que, previamente, habrían emborrachado con una mezcla de vodka y miel. Tras ello, soltaron al pobre úrsido y "Su Alteza Real el Rey Juan Carlos mató a Mitrofán de un solo disparo", dijo Starostin en su carta. Ese mismo año, el rey volvió a África y mató al pobre elefante que se ve en la siguiente foto:
El Rey Juan Carlos cazando elefantes.
y en época más reciente, a los búfalos de la siguiente foto:
El Rey Juan Carlos cazando búfalos.
Es conocida la afición y defensa abierta del Rey por la tauromaquia: 
El Rey Juan Carlos y la Infanta Elena saludando al torero.
No debe sorprendernos, entonces, que la insensibilidad, la sed de emociones sangrientas, el parasitismo y la falta de escrúpulos sean una constante en gente así.

Fuente: Dignidad Huaraz 


29 de abril de 2012

29 de abril: Día del Animal

El Día Mundial de los Animales se celebra cada año el 29 de abril, en homenaje al doctor Ignacio Lucas Albarracín, un incansable luchador por los derechos de los animales, oriundo de San Juan, Argentina. Su fallecimiento se produjo el 29 de abril de 1926 y por eso, por iniciativa de la Sociedad Protectora de Animales, se eligió este día para conmemorar el "Día del Animal". 
En 1907 Albarracín gestionó, con el Dr. Ponciano Vivanco, presidente del Consejo Nacional de Educación, la celebración de la Fiesta del Animal, tomando como ejemplo la festividad del Domingo del animal que realizaban en Londres los pastores de las iglesias, que hacían sermones para inculcar el respeto por los animales. 
Más allá de la celebración de un santo cristiano, hoy este día es observado por amantes de los animales de todas las creencias y nacionalidades para recordar que los animales, aunque no tienen derechos, sienten y sufren el abandono, la crueldad, la tortura y las vejaciones que reciben de los seres humanos. 
En el Día del Animal quiero compartir esta carta, escrita por el periodista, filólogo y escritor Juan Arias, nacido en Arboleas, Almería (España, 1932) y que resume, a través del relato de un elefante de Botswana, el sentimiento de muchos de nosotros con respecto al maltrato animal y al lamentable episodio protagonizado recientemente por el monarca español. 
Elephant Family. Photo by Drew Jackson
Carta de un elefante al Rey de España


Señor Rey de España:


Soy un elefante de Botsuana, el país africano en el que me dicen que Su Majestad ha estado recientemente para descansar de sus fatigas, cazándonos en un safari. Los elefantes somos mansos, aunque fieros cuando nos atacan. También nuestros dioses, los de la sabana, son dioses buenos, no vengativos, aunque sí celosos de sus habitantes. 


Quizás por ello, han querido reservar su vida, importante para su país, aunque han querido advertirle con su caída y sus fracturas en el campamento desde donde salía para cazarnos, que sería mejor ya para Su Majestad, que ha vivido ya más de lo que vivimos uno de nosotros, dedicase su tiempo a otras cosas, en vez de venir a matarnos. 


Por ejemplo a seguir a esa España que se está desmoronando económicamente, a ese 52% de jóvenes que sufren el aguijón del paro después de tantos años de estudios, o simplemente a disfrutar de ver a los animales correr y divertirse en su habitad natural, pero sin escopetas, con las manos vacías o llenas de flores. 


Nosotros sabemos que no ha hecho nada ilegal viniendo y pagando muchos miles de euros para matar a uno de los nuestros. Se lo permiten las leyes de mi país. Para muchos, matar gratuitamente animales es como lo era antiguamente cazar a lazo a los negros o indios para esclavizarlos. 


¿Pero basta que algo sea legal para realizarlo? Existen también las leyes del corazón, no escritas, las de los sentimientos humanos, que dicen por cierto que son superiores a los nuestros y existen ciertos ejemplos que un Rey debe ofrecer de su vida incluso privada. 


Su Majestad, desde su primer discurso como Rey, afirmó que quería serlo de todos los españoles. Yo sé que en España hay aún mucha gente que no se importa de ver sufrir o morir a los animales y que hasta se divierte observándolo. Pero existen también millones, sobretodo de jóvenes, que aman a los animales, que quieren protegerles y conviven con ellos. A esos millones de españoles, no creo que les guste especialmente la imagen de su Rey llegando a esta África, que es nuestro territorio, escopeta al hombro, para distraerse disparándonos sin que podamos defendernos. 


Nos han dicho, Majestad, que posee una de las mejores colecciones de escopetas de caza que existen. ¿Podemos hacerle una sugerencia? Haga de ellas un museo y anuncie a los españoles, que su Rey ya no va a matar a ningún animal y que los años que aún le queden de existencia- que le deseamos sean aún muchos más de los que nosotros vivimos, los va a dedicar a distraerse a favor de la vida y no de la muerte. 


Sabemos que nosotros, los elefantes, como el resto de los animales, no tenemos derechos. Nacemos para ser cazados y muertos. Pero queremos recordarle que nosotros no hacemos mal a nadie. Somos sensibles y humildes y hasta nos parecemos a ustedes los Homo Sapiens. Dicen los zoólogos que somos de los pocos animales que respetamos a nuestros difuntos y de los pocos que saben reconocerse, como los humanos, en un espejo. 


Es verdad que quizás para ustedes los humanos los elefantes seamos inútiles, no somos indispensables para nada, pero, no por ello deben tener el derecho de matarnos. También las monarquías hoy- y lo digo con todo el respeto- aparecen inútiles para muchos y no por eso se hace la caza a los reyes y reinas. 


Y hablando de reinas, nos gustaría saber qué piensa su discreta y querida reina Sofía de su amor por la caza de elefantes. Ella como mujer y como madre, debe saber que en nuestra organización en la sabana, vivimos un reino matriarcal. Ellas, las elefantas, organizan y dirigen nuestra comunidad. Son madres amorosas, dan de mamar a sus hijos durante tres y hasta cinco años y sufren como ustedes los humanos cuando se los matan por capricho. 


Por último nos gustaría que sus nietos y bisnietos, Majestades, un día consiguieran divertirse sin necesidad de venir a África a cazarnos y arrancar nuestros colmillos de marfil para adornar los palacios reales con sus trofeos de muerte. 


Quizás, ni queriendo podrán ya hacerlo porque quedamos sólo 30.000 elefantes en todo el mundo y al ritmo con el que nos matan, sus nietos ya no tendrán como hacerlo, porque habremos sido extintos. Tendrán que conformarse con cazar cucarachas que al parecer tienen un millón de años y resisten hasta a las radiaciones atómicas. Nosotros, no. Somos más grandes, pero más frágiles. Quizás por ello nos amen tanto los niños a los que les gusta divertirse con nosotros. Vivos, no muertos. 


Sólo desearle, Majestad, en nombre de nuestros dioses, que se recupere pronto del susto que le hemos dado, que no era para matarle, sino para hacerle pensar que sería mejor para su Majestad, que a la hora de dejar este Planeta, los elefantes que aún estemos vivos, podamos llorar por usted en vez de alegrarnos por haber perdido a un verdugo. 


Los vientos de la selva son misteriosos, Majestad. ¿Por qué no nos regala sus escopetas en vida? 


Con respeto y en nombre de todos los elefantes de Botsuana. 


Fuente: http://revistalamalapalabra.blogspot.com.ar/2012/04/carta-de-un-elefante-al-rey-de-espana.html

13 de abril de 2012

Digital Circlism (Ben Heine)

Ben Heine es un artista belga, nacido el 12 de junio de 1983 en Abidjan, Costa de Marfil, que se dedica al arte visual multidisciplinario
Es conocido por sus series originales: "Pencil vs Camera", "Digital Circlism" y "Flesh and Acrylic". 
"Digital Circlism" es un proyecto que se inició en 2010 y sintetiza el Arte Pop con el "puntillismo". 
En sus series, Heine suele retratar celebridades, utilizando herramientas digitales con círculos planos sobre un fondo oscuro. Cada círculo tiene un solo tono y color. 
Todo el trabajo de este genial artista se encuentra en la página: http://www.benheine.com/index.php
A continuación, algunas de sus obras:
Julian Assange by Ben Heine 
Lady Gaga - Detail Head by Ben Heine 
Lady Gaga by Ben Heine 
Johnny Depp - Mad Hatter by Ben Heine 
Details - Johnny Depp - Mad Hatter by Ben Heine  
Leopard by Ben Heine
Marilyn Monroe by Ben Heine
Pointillist Self Portrait by Ben Heine
Remembering what I am by Ben Heine
She is My Mona Lisa - Detail by Ben Heine
She is My Mona Lisa by Ben Heine
Steve Jobs by Ben Heine
Blind and Happy by Ben Heine
Bob Marley by Ben Heine
Elvis Presley by Ben Heine
Eminem by Ben Heine
Freddie Mercury by Ben Heine
Give me Colors! by Ben Heine
Jesus by Ben Heine

2 de abril de 2012

2 de abril: Día del Veterano de Guerra y de los Caídos en la Guerra en Malvinas


Tapa del Diario Clarín (segunda edición) del viernes 2 de abril de 1982, con la noticia del desembarco de las tropas argentinas en Malvinas.
Hoy los argentinos recordamos a los 649 caídos en la guerra por la soberanía de las Islas Malvinas. Conmemoramos 30 años de aquel conflicto bélico contra los ingleses, donde tantos jóvenes perdieron su vida, por defender a la patria.

Para entender un poco qué significó esta guerra, voy a transcribir algunos párrafos (con énfasis puesto por mí en negrita) de las notas publicadas en agepeba (Agencia Periodística de Buenos Aires): Los desastres (y los astros) de la Guerra-Parte I y II, por el escritor y director del Instituto de las Islas Malvinas “Padre Mario Migone”, Marcelo Vernet
Recomiendo leer las notas completas en:


“Se califica muchas veces al conflicto bélico de Malvinas como una “guerra absurda”. Lo primero que cabe señalar es que, en estricto sentido, todas las guerras lo son. La guerra, además de ser “la política por otros medios”, es la explícita renuncia a la razón humana. Dos bandos en pugna que no acuerdan, llegan al tácito acuerdo de establecer un curioso mecanismo para dirimir el conflicto, consistente en que aquel que consiga infligir más daño y matar más personas del bando oponente pasa a tener razón. Decir, entonces, que la guerra de Malvinas fue absurda, no dice nada que nos sirva para entenderla o valorarla.

Hay dos circunstancias históricas… …sobre la guerra de Malvinas:

La primera es que fue una guerra largamente postergada. Cuando aún éramos el Virreinato del Río de la Plata se produjo el primer encuentro de armas con Inglaterra por Malvinas. El 10 de junio de 1770 se dio el combate de Puerto Egmont o Puerto de la Cruzada. Lo de combate es casi un eufemismo. Los ingleses dispararon unos tiros como para salvar el honor pero, ante la superioridad de la escuadra Española, se rindieron a los pocos minutos abandonando su enclave en la Isla Trinidad, al norte de la Gran Malvina. El segundo conato de guerra fue en 1833, con la usurpación inglesa de las islas. Esta vez fue la goleta nacional Sarandí, al mando del capitán Pinedo, la que se rindió sin disparar un tiro, y los ingleses ocuparon Puerto Soledad. Ciento cuarenta y nueve años más tarde, en un trágico tiempo para nuestra Patria, el viejo combate postergado volvió a darse, pero esta vez a sangre y fuego. Quizás empezó como una escaramuza más, tendiente a forzar una negociación diplomática ventajosa; pero a un mes de la recuperación de las Islas, el 2 de mayo de 1982, el hundimiento del ARA General Belgrano, hundió toda posibilidad de una salida negociada.

Esto nos lleva a la segunda circunstancia, no siempre aclarada. ¿Quién empezó la guerra? Sin duda Argentina realizó el primer movimiento. Pero la guerra, es decir, la muerte, no empezó el 2 de abril sino el 2 de mayo de 1982. Son conocidas y valorados en nuestro corazón los esfuerzos que Belaunde Terry, el entonces presidente del Perú, realizó para encontrar una salida negociada al conflicto. Ese 2 de mayo, muy temprano, el embajador británico en Lima, Charles Wallace, se reunió con Belaunde para agradecer formalmente la participación de Perú y su propuesta de paz, y para comunicarle extraoficialmente que “lo que necesita Inglaterra es tiempo para poder procesar esta propuesta” que ya contaba con la aprobación del gobierno argentino y la bendición de Alexander Haig, el mediador de EE.UU. No hubo tiempo. Los documentos desclasificados revelan que ese 2 de mayo, Margaret Thatcher, reunida con su gabinete de guerra en la residencia campestre de Checkers, daba la orden al submarino nuclear Conqueror de hundir al Belgrano. Con 323 marinos argentinos muertos ya no había retorno.

Existen otras dos circunstancias que ya implican una valoración.
El inicio de la guerra de las Malvinas significó, para nuestro país, el fin de la Tercera Guerra Mundial en la que la tenebrosa dictadura militar argentina estaba empeñada y que ya se había cobrado más de 30.000 muertes. La teoría de las “fronteras ideológicas” hacía que una casa de las afueras de La Plata quedara detrás de las líneas enemigas y pudieran ser aniquilados sus habitantes.
Sin duda el gobierno de la Junta Militar actuó con irresponsabilidad criminal y ceguera geopolítica al decidir utilizar la causa de Malvinas como salida a la encerrona de su impopularidad, de la insostenible situación económica y la creciente turbulencia social que ya amenazaba su continuidad. Necesitaba protagonizar una épica, una gesta, y la encontró en Malvinas. Justamente porque la reivindicación de nuestra soberanía era sentida por todo el pueblo y atravesaba nuestra historia entera. Un gobierno ilegítimo y genocida tomó la decisión, pero no fue la guerra de un gobierno. Fue la guerra de una nación y fueron los hijos del pueblo los que marcharon al campo de batalla. Absurda como todas las guerras, impulsada por motivos espurios, fue una guerra cargada de sentido nacional, popular y antiimperialista.
Desde esta concepción ensayemos una valoración que supere la calificación de “guerra absurda” buscando su sentido profundo, más allá de las borracheras del general Galtieri.

¿Qué nos dejó la guerra además de muerte, dolor y frustración? A 30 años de los sucesos, debemos contarnos la guerra pasando revista, también, a sus sentidos. Se lo debemos a los que dejaron su vida en los combates o en las duras batallas con la soledad que vinieron después. Nos lo debemos como pueblo que desde su historia construye su destino. Nada podremos construir desde un absurdo.

Sólo le pido a Dios
En Washington, el 26 de abril de 1982, resonó un encendido discurso anti imperialista en el recinto de la OEA. El orador… …Nicanor Costa Méndez, ministro de Relaciones Exteriores y Culto de la más occidental y sangrienta dictadura padecida por nuestro país… …, conocido abogado de grandes empresas multinacionales con sede en Argentina, admirador de la puntualidad inglesa, defensor a ultranza del encuadramiento argentino bajo la órbita de Estados Unidos, confeso y devoto “anticomunista” y antiperonista practicante, que ya había sido canciller del dictador Juan Carlos Onganía, de pronto vio la luz y encaminó sus pasos hacia Cuba para participar de la reunión del Movimiento de Países No Alineados, abrazarse con Fidel Castro y besar sus barbadas mejillas. ¿Un milagro?

La guerra de Malvinas hizo saltar por los aires las lógicas de nuestro encuadramiento internacional y cambió drásticamente el panorama de las relaciones interamericanas. 
Ya algo señalamos en una nota anterior (Malvinas y la Patria inconclusa: 
http://agepeba.org/site/malvinas-y-el-acabamiento-de-la-patria-inconclusa/ Desde luego, que las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur estén o no en ese mapa cambia drásticamente la realidad. Pero están, y su efectiva pertenencia consolida nuestros derechos, tanto en el mar como en la proyección antártica. Cuando se ningunea la importancia territorial del conflicto o se opina ligeramente sobre el derecho a la autodeterminación de los residentes británicos en Malvinas, se olvida que es la disputa territorial más importante del planeta y que el mapa que “los deseos” ingleses pretenden imponernos es un cercenamiento feroz de nuestro territorio. Ir hacia Malvinas es ir a concluir la conquista del mar que, desde nuestro origen como Nación, se nos impone como un desafío ineludible.).

Sin duda “hay un antes y un después de la Guerra de Malvinas en las estrategias de agrupamiento continental y regional en América”.

…26 de abril de 1982,… …la OEA convoca a una sesión del TIAR (Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca) para intentar enmarcar el conflicto bélico de Malvinas y buscar una salida pacífica y negociada. En particular se pretendía hacer efectivo el Artículo 6º del Tratado que claramente estipulaba: “Si la inviolabilidad o la integridad del territorio o la soberanía o la independencia política de cualquier Estado Americano fueren afectadas por una agresión que no sea ataque armado, o por un conflicto extra continental o intracontinental, o por cualquier otro hecho o situación que pueda poner en peligro la paz de América, el Órgano de Consulta se reunirá inmediatamente, a fin de acordar las medidas que en caso de agresión se deben tomar en ayuda del agredido o en todo caso las que convenga tomar para la defensa común y para el mantenimiento de la paz y la seguridad del Continente”. Desde luego, si la paz no era posible, el Artículo 3º.1 definía que “Las Altas Partes Contratantes convienen en que un ataque armado por parte de cualquier Estado contra un Estado Americano, será considerado como un ataque contra todos los Estados Americanos, y en consecuencia, cada una de dichas Partes Contratantes se compromete a ayudar a hacer frente al ataque”.
Pretender que el TIAR, un tratado concebido por Estados Unidos como parte de su estrategia de “Guerra Fría” y que hasta entonces sólo había servido para justificar sus atropellos en la región, se esgrimiera contra la OTAN, era como ordeñar un ladrillo.

…la guerra de Malvinas desnudó todo de una manera tan inapelable que ya no hubo vuelta atrás. Todos los agrupamientos regionales constituidos por fuera de la OEA y sin la participación de Estados Unidos, desde el Grupo Contadora hasta la UNASUR, son posteriores a la Guerra de Malvinas. El fracaso de Estados Unidos en su pretensión de imponer el ALCA en la región, entre tantas razones, no es ajeno a la experiencia histórica de la Guerra de Malvinas, al balbuceante discurso que Alexander Haig, el “mediador” de Estados Unidos en el conflicto, pronunció en la OEA ese 26 de abril de 1982, a la abstención estadounidense en la votación de la Asamblea, a la que sólo pudo arrastrar a Colombia, Trinidad-Tobago y Chile.

Hasta 1982, la OEA no se había pronunciado sobre la soberanía argentina en las Malvinas. Hoy, no sólo la OEA, sino todos los países de la región y todos los Foros regionales se han manifestado explícitamente a favor de la posición argentina y condenado la pretensión colonialista inglesa.

El costo fue muy alto. Nada justifica los desastres de la guerra. Pero que ésta sea una de las estrellitas que ilumine la negra noche de la guerra, y cargue de sentido el absurdo de la muerte de un pibe del Regimiento 12 que aún sonríe en las fotos de las revistas saludando a su madre antes de entrar en la batalla de Darwin.

Sólo le pido a Dios que su muerte no nos sea indiferente. 
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Miradas
“La América Latina vuelve sus ojos hacia la Argentina, en la creencia de que la Argentina también mira hacia América Latina”, señaló el entonces ministro de Relaciones Exteriores de Panamá, Ing. Juan José Amado III, en la Vigésima Reunión de Consulta de ministros de Relaciones Exteriores de la OEA del 26 de abril de 1982. La afirmación implicaba un reproche y una esperanza. Ya señalamos que la guerra de Malvinas hizo saltar por los aires las lógicas de nuestro encuadramiento internacional. ¿Resonó también en nuestra conciencia la adormecida identidad sudamericana? ¿Miramos hacia América Latina? ¿Se cruzaron nuestras miradas, en ese momento crítico de la guerra, reconociéndonos como hermanos? 
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Algo de paz
El 16 de mayo de 1982, dos pibes avanzan por la Avenida Libertador hacia el Club Obras. Oscurece temprano y hace frío. Uno lleva en la mano un pulóver jaspeado que tejió su hermana. El otro unos guantes de lana y una bufanda. La mamá estuvo dándole a las agujas dos días seguidos. Son sus entradas para el Festival de la Solidaridad Latinoamericana.
No importan ahora los tejes y manejes de la Dictadura. Después que el COMFER derrotara en todas las radios a los Beatles y los Rollings, descubrieron las bondades del “rock nacional”. Los pibes van a escuchar al Flaco Spinetta, a León, a Pappo. Y a mandar ropa de abrigo para los pibes que están en Malvinas. Si es hecha en casa y no comprada, vale más.
Las crónicas hablan de 70.000 pibes y 50 camiones del Ejército cargados de ropa, cigarrillos, chocolates, latas de leche condensada. El Canal 9 y las Radio Rivadavia y Del Plata transmitieron en directo todo el festival. La revista Pelo le dedica una edición especial: “La música de rock argentina, a través de su historia, supo sobrellevar y sobrevivir a los embates de las crisis económicas y los eventuales intentos de marginación de los sectores oscurantistas que siempre aparecen en toda estructura social”, arranca la crónica. Todos creen que, eventualmente, hacen referencia al gobierno de la dictadura que organiza el festival. Raúl Porchetto, el Flaco Spinetta y Cantilo se encargan de remarcar que es un acto de la juventud a favor de la paz y en apoyo a los colimbas que están en el frente. “Esta es la gente del futuro, y este presente tan, tan duro / es el material con que edificaremos un mañana total” cantan Pedro y Pablo y todos corean como un himno: “El grito de un hombre, se pierde entre mil / y nacen los jóvenes del año 2000”. La crónica de “Pelo” destaca que “allí, en esa multitud solidaria se encontraba la “gente del futuro”, los que conforman las nuevas generaciones que surcarán el destino de este país”. Y lo surcaron. Apenas comenzado el futuro, el 20 de diciembre de 2001, tal vez muchos de los que coreaban la canción de Pedro y Pablo se vieron envueltos en otra batalla que duró dos días en calles y plazas de todo el país, con 39 muertos entre los que se encontraban 14 pibes con menos de 21 años.
Pero ahora, domingo 16 de mayo de 1982, dos amigos bajan por la Avenida Libertador con las manos en los bolsillos. Van cantando “Algo de paz”, el tema de Raúl Porchetto con que cerró el festival y pensando quién ligará el pulóver jaspeado, blanco y celeste, que quedó tan bien.
¿Estará tarareando “Algo de paz” Martín Raninqueo en las alturas del Monte Wireless Ridge ese 16 de mayo de 1982? Ya entonces era buen cantor. Con sus compañeros del Regimiento 7 de La Plata, le tocó la primera y más importante línea defensiva del avance inglés. Desde el 1º de mayo vienen soportando fuego naval y aéreo en forma continua. ¿Habrá domingo para los bombardeos? Esa noche tiene 19, 20 años, como los pibes del Festival de Obras que terminaron cantando “Algo de paz”. Él no sabe que le mandaron un pulóver y siente frío.
Martín hoy anda por los 50. Vive y canta en La Plata, mi ciudad. Yo lo escucho. Y no puedo recordar qué estaba haciendo la noche del domingo 16 de mayo de 1982. Tal vez durmiendo a mi hija en brazos, tal vez cantándole con mi voz destemplada, el televisor bajito con Malvinas. La guerra bajito para que mi hija se duerma. Hoy Martín canta su “Vidalita de luz y sombra”. Yo lo escucho: “Robo luz de la hierba, / no podrán requisarla / aquí en este equipaje / cuando vuelva a casa. / Y las sombras de mis muertos / que llevo dentro de mi alma”. Y no sé si podré pagar la deuda que pesa en mi corazón. ¿Cuántas guerras en una sola noche?
Verdades
Nos vimos envueltos en la guerra por la acción de una dictadura ilegal y genocida que actuó con irresponsabilidad criminal y ceguera geopolítica. Pero no es un episodio más del “terrorismo de estado”. Impulsada por motivos espurios, fue una guerra cargada de sentido nacional, popular y antiimperialista. Perturbó el camino de la negociación diplomática pero, por sus contradicciones, fue un punto de inflexión que favoreció los agrupamientos regionales sin la intromisión y el tutelaje de los Estados Unidos. Nos reencontró, en la experiencia límite de la guerra, con nuestra pertenencia sudamericana y latinoamericana. Desde esta revelación, desde esta emoción fundante, fuimos y venimos, para afianzarnos en esta pertenencia, cada vez más cargados de razones. Como señala Rosana Guber, debemos animarnos a “comprender el evento desde los diversos puntos de vista que lo atravesaron” y respetar las distintas maneras en que la guerra nos atravesó.
No es ya un problema de estrategia a futuro. Hemos consolidado como pueblo un consenso firme, y es Ley Fundamental de la Nación en su Clausula Transitoria Primera, que el camino para reclamar y conseguir nuestro derecho a la soberanía será “conforme a los principios del derecho internacional”. El tema es cómo damos cuenta de la guerra, cómo la asumimos como parte insoslayable de nuestra historia. Cómo la vamos entendiendo y valorando, en su complejidad. Desastre y estrella. Luz y sombra como la vidalita de Martín Raninqueo.
La verdad de la Guerra de Malvinas no es un a priori, una verdad dada y absoluta. La verdad la vamos construyendo, la vamos inventando. Viento de la historia cargado de sentido, cargado de voces y preguntas que nos interpela y nos empuja.
Debo ser sincero, hay un solo relato que me resisto a considerar en esta construcción y, lamentablemente, fue muy repetido en la posguerra. Es el que afirma que le debemos nuestra democracia a la Royal Navy. Es una infamia que me parece inaceptable. Y de esto puedo opinar con más autoridad porque sí participé, junto a mi generación, de esta batalla.”


http://youtu.be/-kvGal7oCnY


Este es un documental que dura casi 50 minutos, que realizó el periodista Román Lejtman cuando se cumplieron 25 años del desembarco en las islas, en el 2007. Incluye testimonios de excombatientes de Malvinas y sus familiares, ex pilotos deMalvinas y periodistas. También hay declaraciones de Raúl Alfonsín, Mohamed Seineldín y Eduardo Roca el ex embajador de la ONU. Se muestran discursos de Leopoldo Galtieri: "Si quieren venir que vengan, les presentaremos batalla", imágenes de Margaret Thatcher, Alexander Haig, Astiz cuando hace la entrega, el ex presidente peruano Belaúnde Terry como mediador del conflicto, la propaganda en los medios diciendo que se estaba ganando la guerra... Explica los diferentes intereses en el conflicto, incluidos los países que no apoyaron a la Argentina en esta desafortunada guerra, como Chile, Colombia y un país del Caribe (Trinidad & Tobago). Lo único positivo que dejó esta guerra es que aceleró los tiempos para que se instaure la democracia en Argentina, al año siguiente, en 1983. Lo malo de esta guerra fue que los soldados en las islas fueron des tratados, mal informados y maltratados, pero lo peor lo hizo el país cuando volvieron: los soldados fueron des tratados, mal informados, ninguneados y olvidados por una sociedad que les dio la espalda. Tal vez ahora después de tantos años comiencen a ser vistos y honrados como lo que fueron y son: unos héroes.